CORONAVIRUS: El Día Después Del Pico

Es enteramente posible viajar al futuro, lamentablemente quienes lo hagan no podrán regresar o enviarnos información alguna. inexplicablemente, sin embargo, nos ha llegado el informe que transcribimos a continuación.

EL INFORME

SITUACION GENERAL ACTUAL

A los ocho meses del Estado de Calamidad inicial la situación nacional se ha estabilizado, hemos aprendido a vivir con El Virus. No ha sido fácil. La cifra de muertos sigue creciendo, aunque lentamente. En el País muchos achacan estas muertes a los “servicios” prestados por los Neumólogos. Los Capitalinos que lograron trabajar bien en la nube juran que nunca volverán a la oficina, pero los colegios privados no acaban de adaptarse y las escuelas públicas aún no saben qué hacer.

A pesar de las acusaciones de discriminación, el gobierno, presionado por los rebrotes del Virus tras los intentos fallidos de restablecer el ahora “antiguo” sistema de transporte público, por fin aceptó que este quedara en exclusividad para los Tarjetas. El resto de la población carente de transporte propio se moviliza utilizando Exclusivos manejados por los Tarjetas autorizados gracias a la aplicación Cercanías obsequiada por China.

A nivel mundial, en todos los países se demanda la vacuna salvadora para nuestros padres, repetidamente anunciada para “dentro de pocos meses” gracias al avance de la genética. En Estados Unidos una ola popular imparable parece llevar al gobernador de Nueva York, Mario Cuomo a la presidencia. En Europa, tras la “Masacre Sueca- de los Inocentes” el depuesto primer ministro enfrenta acusaciones de Genocidio en La Haya y los regímenes de Venezuela y Cuba se desmoronan ante la caída del precio del crudo y la desaparición del turismo mundial.

Ya nada sorprende y la vida continúa.

RESUMEN DE INFORMES ANTERIORES

LOS TARJETAS

Todo comenzó con los supervivientes, como se llamaban al principio. Los que tuvieron “El Virus” y no murieron, o sea la mayoría de los infectados. Estos se autonombraron como “los Inmunes”, pero todos les dicen peyorativamente “Tarjetas” a sus espaldas. A medida que su número creció empezaron a rebelarse. ¿Porque obligarnos a llevar mascarilla y todo eso, si nosotros ya no podemos infectarnos ni infectar a otros? preguntaban con razón. Exigieron una identificación especial para poder transitar sin mascarilla. La oposición fue grande, pero al final surgieron las tarjetas… Para ellos la verde que se cuelgan al cuello, orgullosos y felices. Siguió lo inevitable.

Quienes requerían de personas auto empleadas en la prestación de servicios preferían o exigían que estos fueran “Tarjetas Verdes”. Se les permitió a Los Tarjetas ofrecer ventas en la calle y se les otorgaron otros “privilegios de excepción”.  Surgieron, claro, tarjetas falsas y tarjetas vendidas, pero lo peor es que surgieron los “Neumólogos”.

LOS NEUMÓLOOGOS

En adición a algunos beneficios a las empresas, el gobierno continúa haciendo su mejor esfuerzo por ayudar a las personas más afectadas por el cierre, proveyendo directamente alimentos y dinero a los que así identifica, apoyándose en donaciones y llevando los recursos nacionales a su límite. Inclusive intentó modificar su método secreto con el cual identifica a los afectados, solicitando colaboración de las congregaciones católicas, evangélicas y otras, para la distribución.  El esfuerzo bien intencionado ha sido insuficiente y en ocasiones injusto. Todo esto llevó a los afectados y a buena parte de la población urbana involucrada en la “economía informal” a una conclusión lógica. Había que Infectarse a propósito, arriesgando la vida, para tratar de pasar a ser un Tarjeta. Una decisión trágica impulsada literalmente por el hambre.

Así surgieron los “Neumólogos” a quienes algunos prefieren llamar “Exterminadores”. A cambio de un pago anticipado y otro posterior los Neumólogos ofrecen contagiar con El Virus a quien les pague. Algunos ofrecen solo el contagio, otros incluyen un “paquete completo” con todo y la prueba inmunológica “oficial” requerida para la emisión de la tarjeta verde, supuesto cuidado durante la convalecencia y tratamiento con hidroxicloroquina “la misma que usa Trump”. Obviamente no mencionan que este medicamento ya está desacreditado por peligroso e inefectivo. El Ministerio de Salud estima que el 4% de los infectados intencionalmente fallecen por diversas razones, pero esto no parece parar la “venta de inmunidad” ya tipificada como un delito penal.

LOS DONANTES

Héroes anónimos sin duda. Aplaudidos en las redes sociales por su nobleza, pero sin retribución real, los Donantes, la única luz en esta triste complejidad son sobrevivientes que donan plasma para tratar a convalecientes en estado crítico. Este tratamiento es el único que parece salvar vidas. La Asociación Plasma   ha organizado un grupo d jóvenes pilotos que donando su tiempo y uso de vehículo transporta al Hospital del Parque y de regreso a casa a un buen número de Donantes.

El beneficio que los Donantes regalan es usado por muchos de Los Tarjetas para justificar sus privilegios, pero la verdad es que la mayoría de los Tarjetas no donan y que hay Donantes activos que no se han ocupado de tramitar su Tarjeta Verde.

LOS EXCLUSIVOS

En realidad, los Exclusivos, originalmente llamados Mixtos, comenzaron desde antes de los Tarjetas.  El asunto de que solo fueran piloteados por un Tarjeta vino después.

Al implementarse el programa de la Nueva Hermandad “TodosJuntos“ del gobierno, se intentó retornar al transporte público pues el número de empresas que podían cumplir con brindar transporte privado exclusivo para sus trabajadores era muy reducido y por otro lado , para parar el  creciente incremento del hambre y pobreza era necesario que todas las empresas que hubieran sobrevivido al cierre volvieran a funcionar. Pero como ya informamos eso trajo los rebotes epidémicos difíciles de rastrear.

Los empresarios señalaron que el transporte privado sería costeable si se permitía que funcionara por ruta en lugar de por empresa, ya que los trabajadores de cada empresa vivían en lugares muy diferentes., lo que hacía al transporte privado ineficiente y caro.  En su lugar, los vehículos “Mixtos” podrían llevar un número pequeño de personas, siempre las mismas y totalmente identificadas, de un área a otra.  Si alguno resultaba con El Virus, argumentaban, no sería difícil identificar con quienes compartía el Mixto, pues el piloto llevaría un registro, aunque, claro, los contactos se multiplicaban a trabajadores de varias empresas y eso hacía más complicado el rastreo al no compartir los viajeros el mismo lugar de trabajo.

Al principio los salubristas en el gobierno se resistieron, pero con la donación del Cercanías y el registro del número telefónico de los pasajeros, fijos y exclusivos, el gobierno aceptó.

EL CERCANÍAS

A cambio de alejarnos del gobierno amigo de Taiwán, China Continental nos donó su famoso programa Cercanías. Los usuarios se registran al programa tomándose un “selfi” e introduciendo el número de su celular, su CUI y su huella dactilar, así como su dirección y la de su trabajo. Asimismo, deben comprometerse a tener el celular encendido siempre bajo pena de perder su derecho a trabajar.

A través de complicados algoritmos, inteligencia artificial y conexión con los proveedores de servicio celular, Cercanías no solo monitorea y lleva registro del movimiento geográfico de los registrados y sus cercanías a otros registrados (de ahí su nombre) sino que es capaz de identificar las caras que puedan ser captadas  por las cámaras del gobierno instaladas en lugares públicos y de enviar a agentes de la recientemente creada Policía de Salud a la ubicación de quien hubiera estado cercano, en los últimos 20 días, a algún infectado recién detectado.

Hubo objeciones, claro, pero tras la espeluznante decisión de la Corte de Constitucionalidad declarando que, si bien el programa contravenía los derechos humanos, basándose en las recientes tendencias evolutivas de las cortes internacionales y chinas, y las doctrinas de los más modernos tratadistas constitucionales venezolanos eso   no importaba cuando se trataba de defender el bien común internacionalmente reconocido, ya no hubo a quien apelar y así quedó.

LOS DESCARTABLES

El movimiento “No somos Descartables” surgió como respuesta a quienes, a partir del segundo mes de aislamiento, en continuas declaraciones anónimas en las redes sociales exponían que el precio que se estaba pagando para proteger a “ancianos” y enfermos “que de todas maneras morirían en el corto plazo” era demasiado alto, por lo que había que terminar con el aislamiento y retornar a la normalidad. No faltaron luego voces extremas también dentro de los de mayor edad que a través de una supuesta organización secreta llamada Lobos Grises repartió volantes amenazando eliminar un joven escogido al azar por cada muerto  por El Virus mayor de 65 años. Pero todo quedó en bravuconadas y parece no pasará a más.

*** fin del informe ***

Nuestra Conclusión

¿Ficción? Obvio.

 ¿Predicción exagerada? Seguro.

Pero ¿Podría usted señalar las diferencias entre el informe y el plan para los próximos dos o tres meses?  Difícil, ya que los planes no están nada claros. Inclusive, salvo algunas excepciones (1) los que critican los planes creyendo conocerlos, van más encaminados a negar la realidad y discutir la receta médica que a proponer como cumplir con la receta sin destruir el empleo, las empresas formales y la vida de los que prestan servicios informales. Como Estados Unidos ya descubrió, cuando el futuro te llega, ya es muy tarde para cambiarlo.

Vivimos una situación que parece ficción y en la cual la ficción se vuelve realidad. Elfuturo no está predeterminado, pero manejar el futuro requiere de planes y los planes requieren de información no solo para quienes los elaboran sino también para quienes deben apoyarlos y cumplirlos.  Corresponde a epidemiólogos e infectólogos dejar de comportarse como espectadores de un interesante fenómeno, desplazar de la palestra a los políticos, ideólogos y economistas que quieren ser expertos en todo y con claridad y firmeza aclarar a la población las opciones y consecuencias que enfrentamos según la ciencia.  A ellos les corresponde hablar sobre los diferentes caminos y costo en vidas para llegar a la inmunidad de grupo. Luego a los demás nos corresponderá decidir y actuar.

Con algunas excepciones puntuales, hay consenso en que el gobierno está haciendo lo mejor ante opciones muy limitadas, principalmente para evitar que la epidemia se salga de control, pero las medidas económico-sociales, buenas o malas, no parecen ser sustentables en el mediano plazo. Ya sea entresacando de entre los que luchan por solventar lo inmediato o llamando a quienes están afuera, el Ejecutivo tiene que crear un grupo de trabajo ajeno al problema de hoy, dedicado exclusivamente a revisar y completar los planes para el día después del pico.

Todo esto es urgente.  El futuro no espera, es un animal desconocido que pudiera ser violento y que se nos viene encima en medio de la Pandemia y que no hay que confundir con la recuperación económica a lograr en 2021, cuando el periodo de oscuridad al que estamos entrando haya terminado

Enrique Maza, 11 de abril 2020.

Notas:



 

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